26.7.12

volveré y seré millones

Pueblo, apasionada solidaridad con mi pueblo, dice mi afiche, que sobrevivió a épocas solitarias, a tantas cosas duras, algunos "peronismos" incluidos...

Hacía mucho que no escribíamos nada en el coso este, pero a veces el corazón se agita y pide cancha. Porque esa mujer, y tantas otras, por lo menos las de mi familia, me enseñaron un par de cosas de esas que no se olvidan nunca. Una de ellas es que no hay otro lugar en el que pararse que no sea el lugar del pueblo, del que la yuga, la vive y la curte todos los días, aunque a veces uno no esté de acuerdo, aunque a veces la ideología o los lecturas nos tienten a cruzar el charco, y pensemos que al pueblo se lo debe "iluminar".

Pavadas. La vida del pueblo, la nuestra al fin de cuentas, es otra cosa, mucha más intensa, más grande, y tiene más luz propia que cualquier mistongo farolito. Y está muy bien: cada cual en su trinchera, por supuesto, con sus creencias y sus convicciones, con sus camisetas de distintos colores, pero... Cada cual con sus amores, sus historias, sus acciones, pero... Siempre del lado del pueblo, hijo. Siempre. ¿Tamo'?


Cuestión que nos damos el permiso, hoy, de ensayar un cariñoso homenaje a ella. Y en ella a tantas, a todas las mujeres del pueblo con los ovarios bien puestos.

Compañera, pa' usté (para ustedes), orgullosamente: ¡Salú!

8.7.12

¡Fuerza, Negro!

¡Los Habitués volvemos a Café Vinilo!
...ésta vez para darle un mano a un amigo que anda con algunos problemas de salud y necesita de la solidaridá de todos nosotros para poder rehabilitarse...
Además nos damos el gustazo de compartir escenario con el Dúo Padilla-Merlo (¿O Merlot? Che, ¿a éstos dos nos los junamos de algún lado?)
Eso sí, haga su reserva con anticipación al mail de más abajo o véngase tempranito que se llena.
Y ni le cuento del guisito de lentejas porque, mire, se nos queda medio mundo afuera...
¡Salú! Y ¡gracias che!


Lunes 9 de julio / 20 hs.
Café Vinilo
Gorriti 3780 (y Salguero), Palermo
Entrada: $ 50 (a total beneficio del Negro Daniel Martínez)
Reservas por mail a reservas@cafevinilo.com.ar


Nunca mejor dicho: ¡Salú!

5.7.12

compadrito a la violeta

La verdá, lo que sigue no viene a cuento de nada. Pero resulta que me encontraba en el bulín pavita y mate en mano rumiando algunas cuitas de esas del amor y, pa' mejor acompañar a mi nocturnal desgracia, escuchando algunos tangachos viejos, y no va que enrredepente se me iluminó el escracho con una sonrisa de mi flor.


Porque mire: uno que ya peina algunas canas y, pa' más datos, la va de hidalgo porteñazo de la más (im)pura estirpe lunfarda, a veces se le hace cuesta arriba acostumbrarse a algunas cosas; cambios de época, que le dicen. Uno disimula, claro, y aunque es rotundamente feliz con su vieja y querida Spica a transistores y su teléfano a disco por ahí va, y nada más que pa' no sentirse un remanyado dinosaurio, se estrola el aguinaldo contra un esmarfon, por ejemplo (¡que ni sabe para qué catzo le puede llegar a servir!, y encima sabiendo la montaña de fiaca que le va a dar ponerse a leer el coso de las instrucciones), o en un buen par de timbos a la moda; altas llantas, como se dice ahora, para darse dique de mozo jovial con las naifas del bailongo.

Porque uno se siente un sogán, qué quiere que le diga, cuando le hablan y no entiende, o viceversa, cuando el que parla es uno y los purretes lo miran con cara de logi, de desconcertada sota de bastos. Porque existen en la actualidá algunos giros idiomáticos, digamos, expresiones del lunfardo actual que lo dejan a uno papando moscas... Y uno sonríe, por las dudas, y hace así con la cabeza, con guiño cómplice y cara de entendido...

Pero vino a resultar que una de ellas en particular, de uso bastante extendido en la purretada actual, se me acaba de revelar como heredera de la más ilustre estirpe gardeliana. Y, qué me cuenta, se me dio por pensar que nada es al pedo en este mundo, y mucho menos si de expresiones culturales populares se trata. Compruebe usté mismo, promediando el estribillo, el vocablo del que le hablo, Pablo, y sonriasé conmigo. Ahí va:


Compadrón, tangazo del '27 de Luis Visca y Enrique Cadícamo. ¡Qué grande!, compadrito de papel maché... ¡Ja!

Bueno, en fin. Salute... ¡¡¡gato!!!